Súper regalo navideño | HOY

Fernando Ortiz Crespo es en ornitología y cuidado de la naturaleza el Pedro Vicente Maldonado del siglo XX. Autoridad mundial en colibríes. Sus investigaciones fueron publicadas en revistas especializadas de la República de Estados Unidos de América (EUA). Columnista del diario HOY en un lapso de tres lustros. Hizo lo posible por salvar a las islas Galápagos de la fiebre del oro. Preservó el volcán Pasochoa del cemento y los alcaldes. Su entusiasmo por la naturaleza tenía la fuerza del mar, el viento y la montaña. Siempre activo. Formó biólogos minuciosos. Guiaba a investigadores nacionales y extranjeros, pues conocía a fondo la biodiversidad de nuestra tierra.
La vida y muerte de Fernando son el mejor texto de metodología de la investigación, porque fue una Senecyt viviente, sencilla, cordial y humana. Murió ahogado en las aguas de Micacocha cuando investigaba las aves de la zona, el 13 de septiembre de 2001.
El colibrí es muy sensible al veneno espiritual. Antaño fue el veneno de la moda de los sombreros de señoras tocados de plumas de picaflor. Hogaño son las malas emanaciones del odio y la calumnia que afectan a estas aves que en la escala de la evolución son las formas visibles de los ángeles y del Dios del amor, pues no en vano son aves polinizadoras, esplendor de la belleza en movimiento y modelos de madre con sus crías. Cada insulto en una cadena nacional de sabatinas espanta a estos primorosos pajarillos que conocen a fondo el corazón de las flores. El pantano, las extingue. Los Colibríes. Historia natural de unas aves casi sobrenaturales es un súper regalo navideño.