La justicia y la teoría del asno - 14/Julio/2011 | Explored | Archivo de Noticias de Ecuador

Una efectiva retórica del líder de la revolución ciudadana y una costosa e inagotable propaganda han logrado lo insólito: transformar la realidad en ficción; en buen romance sería la habilidad para negar la evidencia. La semana anterior, el país entero contempló cómo la Policía, que acata órdenes del Ministerio del Interior, impedía al presidente del Consejo de la Judicatura, Benjamín Cevallos, ingresar a su despacho, tras haber sido destituido por un juez inferior, mientras afuera, activistas del Seguro Social Campesino, organización cercana al oficialismo, al mando de Rodrigo Collahuazo, rodearon, amenazantes y en tumulto, la sede de la Judicatura. Días atrás, se pudo ver a ministros de Estado presionando a los jueces, con gritos y amenazas, para conseguir fallos favorables; mientras que otro secretario de Estado, confesaba haber visitado a un juez que conoce una causa cuyo fallo es de supremo interés para el poder político. "La justicia es un asno y en él solo cabalga el Gobierno". La sentencia, atribuida al romano Marco Tulio Cicerón, en el Ecuador sigue vigente, 2 000 años después de haber sido pronunciada. Y es que la historia del país es pródiga en episodios que confirman que uno de los más caros objetivos de los gobernantes es manejar la justicia, donde parece reside el verdadero poder político.